Las Iglesias
La Ermita de la Virgen de la Peña
La Ermita se encuentra situada en el denominado Cerro del Águila, a unos cuatro kilómetros de Puebla de Guzmán. Fue edificada, probablemente, en el siglo XVI, aunque en el siglo XVII se acometieron las obras más importantes de construcción. Presenta su planta en forma de cruz latina, consta de una sola nave cubierta con armadura de parhilera a la que cruza el brazo transversal con bóveda semiesférica sobre pechinas y arcos de medio punto. Al fondo, en la capilla mayor, se abre el camarín de la Virgen de la Peña , en el centro de un retablo que entallara en 1.711 Juan de Valencia, bastante reformado después de los estragos de la guerra civil, posteriormente reformado en 1.960 y, por último en 1.992 por obra de Antonio Díaz Fernández. La techumbre cuenta con un artesonado de noble madera y en la confluencia de sus aspas se levanta una policromada cúpula de media naranja. Cuenta con dos hermosas vidrieras que representan las apariciones de la Virgen de la Peña y la Virgen de Piedras Alba al pastor Alonso Gómez
La imagen de la Virgen de la Peña es una escultura en madera de encina policromada. Mide 0,93 metros de alto y es una obra anónima sevillana de mediados del S. XVI.
La Señora , sedente, con el pie izquierdo sobre cojín rojo, sostiene arrellanado sobre su regazo al Hijo. Aparece ataviada con traje jacinto y manto azul, con vueltas rojas y anchas fimbrias doradas. El rostro es de juvenil y morena belleza con ensoñadora mirada. La corona que ciñe sus sienes es un vistoso ejemplar de la orfebrería sevillana. Es de plata dorada enriquecida con aguamarinas, rubíes y zafiros. Ostenta los punzones de cárdenas y cochinito y conserva una inscripción que dice: "Pesa 28 onsas y 10 adarmes. Año de 1.763" .
El Niño, con traje jacinto, bendice a la griega con la mano derecha y muestra en la otra el globo terrestre. El total resultante, de armoniosos volúmenes, es uno de los más bellos ejemplares de la estatuaria del quinientos en la provincia de Huelva.
La Iglesia de la Santa Cruz
El Convento
El convento de María Auxiliadora o, Beaterio de la Orden Tercera de San Francisco de Nuestra Señora de los Milagros, se construyó a principios del siglo XVIII. En la actualidad tiene un indudable valor histórico por ser uno de los escasos ejemplos de beaterios existentes en la provincia de Huelva. Cabe destacar su estilo barroco, sobrio, austero, acorde con la función que iba a albergar. Lugar de rezo para las beatas de la Orden Tercera de San Francisco donde destacan los arcos carpaneles del claustro y los particulares materiales que se utilizaron para su construcción: una mezcla de ladrillos y piedras típicas de la comarca del Andévalo y de la sierra onubense, como pizarra y otras piedras de origen granítico. La edificación barroca consta de iglesia, claustro, dependencias alrededor de éste y huerto.
El edificio estuvo tras diversas vicisitudes abierto hasta 1936 en que se cerró, volviéndose a ocupar el 6 de septiembre de 1939 tras una rehabilitación de urgencia, por una comunidad de religiosas salesianas, permaneciendo ocupado durante quince años, hasta que el progresivo deterioro del edificio obligó a su abandono. En esta situación permaneció hasta el año 1987, encontrándose desplomados los techos del convento, los muros ruinosos, el huerto abandonado y algo mejor la iglesia, aunque con evidentes signos de ruina. Una parte del solar fue cedido para la construcción de un centro de día para la tercera edad y promovido por el párroco de la localidad, encabezando un grupo de entusiastas colaboradores, se procedió a la rehabilitación de la iglesia.
Iglesia de Santa Bárbara
Levantada hacia mediados del siglo pasado, junto al resto del nuevo poblado de Las Herrerías, la Iglesia de Santa Bárbara es de formas sencillas, planta rectangular de un sólo cuerpo, pequeña sacristía y una casa parroquial aledaña. La construcción se integra con perfección en el resto de la Plaza que lleva su nombre, tanto por el uso de arcos tipo cañón como por el blanco cal de todo el cuerpo.